Si quieres ser un buen surfista, es fundamental que conozcas los tipos de olas y las partes de una ola, esta es parte de la información que recibirás si te apuntas a nuestras clases de surf para principiantes en Lanzarote.
Bueno, saber qué ola nos viene y qué características tiene, nos facilitará la vida a la hora de tomarla, así que es fundamental conocer estos datos. Veamos qué podemos ver en una ola.
Los tipos de ola que podemos encontrar surfeando
Lo primero que debemos decir es que las olas son los movimientos más importantes del mar. Eso que tanto nos gusta y que permite la base de nuestro deporte se forma por el impulso de los diferentes vientos. La velocidad del viento permite la formación continua de olas, es decir, desde pequeñas cretas que llegan a la playa hasta las grandes y potentes olas que se generan en condiciones inestables, como ocurre con las tormentas.
Es, justamente, en el mar abierto donde se ven las olas de mayor tamaño, aunque también es posible que se produzcan grandes olas muy cercanas a la costa. Por lo tanto, conviene saber cuáles son los 3 tipos de olas principales:
Olas de oscilación
Lo primero que sabemos es que este tipo de olas se llaman así porque su agua no avanza, sino que solamente se describe un giro al subir y bajar casi en el mismo sitio donde se inició el ascenso de la ola. Se trata de las olas más habituales y a las que estamos acostumbrados a ver al practicar deporte, motivo por el cual simplemente las conocemos como olas.
Se trasladan de un lugar a otro, por lo que la mayoría tiene forma de arco, siendo muy buenas para practicar surf. A la vez, en las olas de oscilación se tiene en consideración la altura, que es la distancia vertical entre la cresta o porción más elevada y el punto más bajo de la depresión o surco. A la vez, es importante evaluar la longitud de la ola, que es la distancia entre dos crestas sucesivas, mientras que el período de la ola es el tiempo que se necesita para que dos crestas sucesivas pasen por un punto.
Olas de traslación
Aquí hablamos de las olas que se producen cerca a la costa, las cuales tocan el fondo, avanzando y estrellándose contra el litoral, generando una formación abundante espuma. Cuando regresa el agua hacia el mar se origina la resaca.
Cabe destacar que este tipo de olas no se pueden ver a simple vista, puesto que su movimiento no se realiza en la superficie del mar, sino que todo se hace a una escala mucho más profunda. A la vez, vemos que estas olas oscilan, es decir, se mueven en círculos, un poco más abajo de la superficie, siendo un movimiento casi imperceptible.
Olas sísmicas
Tenemos el tercer tipo de ola, que implica aquellas que son producidas por sismos en la corteza oceánica, las cuales son muy peligrosas cuando llegan a la costa. Otro de los nombres con los que se las conoce es como tsunamis.
Vemos que las olas sísmicas se forman cuando existen terremotos o erupciones volcánicas. Este tipo de oleaje abarca codo el espesor de la capa de agua. Debido a la enorme cantidad de movimiento y sacudidas, surge una ola o una serie de olas que se presentan una tras otra, que es lo que se conoce con el nombre japonés de tsunami.
Hablamos de un fenómeno poco frecuente, aunque extremadamente peligroso. Se trata de olas que tienen grandes dimensiones, especialmente en las producidas por los terremotos originados por dislocaciones y fallas del fondo marino. Incluso, sabemos que en septiembre de 1923, en el golfo de Sagami, cerca de Tokio, un terremoto ocasionó una brusca modificación en las profundidades, motivo por el cual el fondo descendió hasta 400 m y a una distancia de 2 km se elevó a 2, 30 m. Generándose estos desplazamientos, se obtuvo como resultado que cerca de 22 ,6 km de agua fueron desalojados por encima del nivel del océano, formándose una ola tsunami de unos 7 m de altura, derivando en que una parte se dirigió al océano y otra rompió en la costa del golfo, destruyendo todo a su paso.
Importancia de las olas
Ya sabemos los tipos de olas existentes. Es importante saberlo ya que, cuando nos dedicamos a pensar en el mar y los océanos, inmediatamente tenemos en cuenta el oleaje: tanto su imagen como su sonido. Sería imposible imaginarse la playa sin olas, ya que forman parte del paisaje de la playa y, al mismo tiempo, son esenciales para el deporte.
Ya vimos que el viento es el responsable de la generación del oleaje que se logra desplazar a lo largo de la superficie del agua de mares y océanos. Al mismo tiempo, es fundamental saber cuáles son las zonas en las que se produce el oleaje.
Las principales áreas donde se genera el oleaje ocurren en los lugares donde los vientos soplan del Oeste en las zonas templadas de los dos hemisferios. Si nos alejamos de estos lugares, tan solo hay un área importante con generación de olas. Hablamos, en este caso, del mar de Arabia, lugar que, durante los meses de junio, julio y agosto, se produce un fuerte oleaje provocado por el monzón de verano.
No es habitual que los vientos alisios generen grandes olas. No obstante, los ciclones tropicales sí generan fuertes olas de forma irregular, siendo que la mayor parte de las olas observadas en las regiones intertropicales sean originarias de las regiones de latitudes más elevadas, propagándose a lo largo y ancho durante miles de kilómetros.
Ahora que sabemos esto, debemos pasar a ver cuáles son las partes de una ola:
Partes de una ola
Ya sabemos qué tipos de olas hay. Sin embargo, cuando una ola se genera, la podemos dividir en varias partes importantes. Tener en cuenta este conocimiento ayudará a mejorar nuestra relación con el deporte, por lo que podemos ver qué aspectos evaluar.
Línea de agua quieta
Lo primero que hablamos es de una línea que corresponde con el nivel del océano cuando no es afectado por las olas. Se trata del momento que que se toma como referencia del océano durante un largo periodo de tiempo. Así, cuando tengan lugar las olas, se puede hacer una operación y sumar y restar la altura de las olas con respecto a esa medida.
Lo que vemos es que esta línea de agua quieta se marca en el centro de la ola de aguas profundas, localizándose mucho más por debajo cuando las olas son costeras. Por lo tanto, se trata de una ubicación de referencia ideal si pensamos averiguar la altura de las olas, por ejemplo.
Cresta de la ola
Se trata del punto más conocido por todos y uno de los que más nos gusta observar. En este caso, hablamos del punto más alto de la ola. Es famosa por los surferos y se reconocen por la punta de agua blanca y espuma que se genera cuando la ola se empieza a doblar y caer, “rompiendo” contra las costas.
Valle
Muchos no lo conocen, pero se trata de todo lo contrario a la cresta de la ola. Esto es así debido a que es el punto más bajo. Si quieres verlo, vas a tener que prestarle atención al punto más bajo que hay entre dos olas.
Altura
A veces, confundimos la altura con la cresta. Sin embargo, la altura de la ola es la diferencia que hay entre la cresta y el valle. Es decir, lo que mida esa distancia es la altura que tiene la ola, mientras que la cresta es la parte más alta en la que se ubica la ola.
Longitud de onda
La longitud de onda de una ola es lo que mida la distancia horizontal entre dos olas. La medida se puede realizar entre cresta y cresta o valle y valle, pero es fundamental que puedas hacerlo si lo que quieres es evaluar cómo puede llegar a romper.
Período
El período de una ola es el tiempo que ocurre entre una ola y otra. Para conseguir esta medida, lo que se realiza es escoger un punto fijo y calcular el tiempo que tarda la cresta de la ola en pasar hasta la segunda cresta. Esto es especialmente interesante cuando vemos que el mar está “movido”, es decir, cuando se rompe seguidamente. A la vez, este tiempo también se mide de valle en valle.
Frecuencia
Aquí tenemos a la frecuencia, que es algo similar al período. Sin embargo, la diferencia es que sólo marca la medida del número total de olas que pasan mediante un punto de referencia por unidad de tiempo. Apúntate en nuestros cursos de surf Lanzarote y aprende de forma presencial, también ofrecemos alojamiento a 100 metros de la playa de Famara y alquiler de tablas de surf en Lanzarote para los que quieran venir a surfear por libre
Amplitud
La amplitud es la distancia que existe entre la línea de agua quieta y la cresta de la ola. Básicamente, podría decirse que se trata de la altura de la mitad de la ola.
¡Ya aprendiste qué tipos de olas existen y cuáles son sus partes! Con esta información, podrás mejorar tu experiencia en el surf, ya que siempre es fundamental saber a qué nos enfrentamos cuando practicamos este deporte, a la vez en la que es vital saber todo lo que se pueda en referencia a nuestras grandes amigas: esas que nos permiten movernos y disfrutar la enorme sensación de usar una tabla.